Preparación lingüística

Willkommen in Deutschland! – Informaciones sobre la vida cotidiana en Alemania


Las costumbres, tradiciones y hábitos alemanes suelen ser un poco distintos a los de los españoles. Eso se puede observar en todos los ámbitos de la vida cotidiana, asi que te deberías familiarizar con estas diferencias antes de tu partida.

El primer aspecto por el que los alemanes y españoles se diferencian es el transcurso del día. Normalmente, en Alemania el día empieza un poco más temprano. Por ejemplo, las clases ya empiezan a las siete y media o a las ocho de la mañana y los supermercados también ya abren sus puertas a estas horas. Antes de salir de la casa, se suele tener un desayuno abundante, ya que se considera el desayuno como la comida más importante del día. A diferencia de las costumbres españolas, se come mucho más salado, sobre todo pan de diferentes tipos. Alemania es el país, en el que se puede encontrar la mayor variedad de panes diferentes. Sin embargo, también hay gente que prefiere desayunar cereales o algunas frutas con yogur. Para beber se toma un té, zumo o una taza de café. Entre las doce y las dos de la tarde se toma el almuerzo, en el que se suele comer un plato caliente, como salchichas con ensalada de patatas, filetes empanados o diferentes tipos de verdura. Si los alemanes no consiguen comer algo caliente durante el almuerzo, lo hacen durante la cena, que se sirve entre las séis y ocho de la tarde. Además, por la tarde, los alemanes quedan para tomar un café o un té acompañado con pasteles o tortas – “Kaffee und Kuchen”- sobre todo durante los fines de semana. Otra diferencia es que en Alemania no hay siesta, asi que normalmente las tiendas quedan abiertas desde las nueve de la mañana hasta las siete o ocho de la tarde.

Al igual que el día empieza un poco más temprano en este país, la vida nocturna también ya empieza alrededor de las ocho de la tarde y las discotecas abren a las once. Debido al clima los alemanes normalmente quedan en un bar, un restaurante o en casa de alguien. Sólo durante los meses de verano y los primeros meses de otoño suelen quedar fuera para hacer una barbacoa o verbena. Durante este período del año también hay ferias en casi cada pueblo y ciudad. La más conocida y famosa de estas ferias es la fiesta dedicada a la bebida nacional de los alemanes: la cerveza. La fiesta de cerveza o mejor conocido como la “Oktoberfest” reune a más de 6.000.000 de visitantes cada año en Múnich. Durante estos días todo el mundo va vestido de ropa tradicional alemana como el “Dirndl” o los “Lederhosen” y litros y litros de cerveza son bebidos en enormes jarras de un litro, llamadas “Maßkrüge”, mientras se comen rosquillas y salchichas de cerdo. Después del “Oktoberfest”, entre los meses de noviembre y diciembre muchas ciudades de Alemania celebran mercados navideños – llamados “Weihnachtsmarkt”-, cosa es una tradición muy típica alemana. En estos mercados hay una gran cantidad de puestos en los cuales se pueden adquirir adornos de navidad, joyas, velas, juguetes y muchos productos más y hasta degustar un buen vino caliente con especias –“Glühwein”-, castañas, pan especiado y almendras tostadas.

En general se puede decir que la vida cotidiana en Alemania es un poco más estresante que la vida española, lo que se debe al hecho de que la puntualidad y el planeamiento preciso son dos de los principios más importantes de los alemanes. Eso significa que, si tienes una cita con alguien a las dos de la tarde, sería mejor que llegaras a tiempo o incluso un poco antes. Dejar esperar a un amigo o conocido más de cinco minutos ya se considera como un comportamiento muy maleducado. Además los alemanes también son un poco más formales con respecto a relaciones interpersonales. Para saludarse no intercambian besos, sino se dan la mano. Sólo amigos íntimos se abrazan para saludarse, pero nunca se suele besar. También es normal utilizar la forma “usted” dirigiéndose a personas desconocidas o de mayor edad. Normalmente, tu interlocutor debe ofrecerte que le puedes tutear antes de que lo hagas.

Teniendo todas esas peculiaridades en cuenta, te va ayudar a hacer amigos rápidamente y a integrarte en la sociedad alemana. Seguramente lo vas a pasar bien y aprender mucho si aceptas la cultura de tu país de intercambio e intentas aprender su idioma. ¿Todo eso te suena un poco a chino? ¡Exacto! Pero ya sabes: A donde fueres, haz lo que vieres...